[Concurso] 4 códigos para Call of Duty World at War Beta – Xbox 360

World at War

Actualizado: Ya se han repartido los códigos de la Beta, gracias a todos por participar 🙂

Desde Activision nos ceden gustosamente 4 códigos para bajar y participar en la beta de Call of Duty World at War. Si tenéis Xbox 360 y queréis probar de primera mano el nuevo shooter de Treyarch, basta con que envíes un correo a jesuson (arroba) gmail (punto) com con los siguientes datos:

  • Nombre y Apellidos / Nick
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Se enviará un código por participación, hasta agotar los cuatro códigos de que dispongo; y por supuesto, espero que dejéis vuestras impresiones en forma de comentario en este mismo artículo. Pues eso, lo tenéis facilito. Ya tardáis.

Review Viva Piñata: Trouble in Paradise – Xbox 360

Viva Pinata

Dicen que cuando una fórmula funciona, es mejor dejarla tal y como está. También he escuchado por otros lares que si no te renuevas, mueres automáticamente. Incluso he llegado a escuchar que el árbitro del Atleti – Real Madrid se lesionó porque le castigó Dios por ser mal árbitro. No se quién tendrá aquí la razón, pero sé quién no la tiene, y va vestido de negro. El caso es que Viva Piñata: Trouble in Paradise no corrige apenas nada respecto al original, pero sí que aumenta. Simple y directo.

Concretamente, el aumento se nota en la interfaz, en la diversidad de escenarios, en los modos de juego, en el aprovechamiento del juego cooperativo y, cómo no, en el número de piñatas disponibles. No está mal, ¿no? La cosa queda así: el doctor Pester vuelve a la carga en pos de arruinar nuestros sueños de futuro jardinero. La crisis aprieta y no está el horno para bollos, así que habrá que pensar más que nunca para encajar las piezas de este dulce y colorido puzzle.

Porque al fin y al cabo, Viva Piñata: Trouble in Paradise va de pensar. De pensar cómo demonios podemos lograr que tal o cual piñata se quede en nuestro jardín, sin que baje demasiado nuestra población de gusañatas -así llamo yo a mis piñatas gusano, qué pasa- a la vez que viajamos al árido desierto a la búsqueda del especímen más exótico que complete nuestro jardín, o entrenamos a nuestras mascotas para que sean la atracción del pueblo en la feria de este año. Es curioso volver a comprobar cómo un título que desde fuera parece el más infantil del mundo, logra montarnos un reto de mil pares de narices, una y otra vez, como si se tratara del mejor y más serio juego de estrategia.

Viva Pinata

Pero viniendo de unos maestros como Rare, la verdad, no sorprende. Y es de agradecer que la evolución de su particular Paraíso sea bastante notoria. Por ejemplo, la interfaz aprovecha todos los accesos directos que nos puede proporcionar el pad de Xbox 360. Cruceta y botones principales nos llevarán a las herramientas básicas; una segunda pulsación será el camino más rápido para opciones avanzadas, como la tienda de semillas o el inventario de piñatas y objetos disponibles. Sobresaliente en forma de bofetada en la cara para todo aquel que dejó por imposible el diseñar un interfaz para controlar un juego de estrategia en condiciones para consola.

Por su parte, el modo cooperativo está correctamente implementado; si optamos por compartir el sofá -ojo al logro que nos dan si jugamos una hora de este modo- con otra persona, podrá ayudarnos en las tareas del jardín, con la posibilidad de acceder prácticamente a todas las opciones del juego.

Al principio nos resultará algo caótico, pero basta acostumbrarse y sobre todo, sincronizarse para facilitarnos la vida. De igual modo, también resulta acertado el permitir jugar online con otra persona, con la consiguiente ventaja de disponer de dos vistas independientes. El anfitrión podrá permitir control total al invitado, o restringir su poder para que simplemente funcione como mero espectador.

Por si el modo «campaña» -en el que la dificultad avanza progresivamente y tenemos ciertos objetivos siempre en el punto de mira- se nos llega a atragantar, siempre podremos optar por el modo Jardín Libre, en el que tendremos libertad absoluta para hacer y deshacer a nuestro antojo.

Viva Pinata

Viva Tecnología

El motor gráfico no ha sufrido apenas modificaciones, pero es que ya era extremadamente solvente hace dos años. Ciertos detalles como la inclusión de sombras proyectadas por la iluminación filtrada a través de las nubes y el genial diseño de las nuevas piñatas redondean aún más un aspecto simpático, vivo y detallado. Por poner alguna pega, la animación de los personajes humanos -si es que el semillero de la máscara de hierro lo es- se hace ortopédica en algunas ocasiones.

Por su parte, el audio lo conforman un conjunto de melodías que alternan tonos fiesteros con otros más sosegados, a los que se suman los verdaderos protagonistas del juego: las piñatas. Por encima de la comentada banda sonora, escucharemos como rugen, se lamentan, o emiten llamadas de amor o de alegría. Intachable.

Conclusiones

El mundo de Viva Piñata ha vuelto a su origen, tras el dubitativo paso por los minijuegos del pasado año. Trouble in Paradise logra corroborar muchas teorías: que uno no debe fiarse nunca de las apariencias, que una buena interfaz es esencial para conectar con el jugador o que el modo cooperativo es la gran estrella de esta generación. ¿Demasiado similar al primer Viva Piñata? Es posible. Aún así, sigue siendo un juegazo a todos los niveles.

Nota Trouble in Paradise: 8

Pro Evolution Soccer 2009 en diez breves impresiones

PES2009

  1. El estilo retro del menú no está mal. Al menos es diferente a lo de tooodos los años. Y las melodías rockeras molan. Bien.
  2. Faltan muchas licencias. Demasiadas. Pero me he hartado de reir con el Sevilla Verde y Blanco, con escudo de arte abstracto y vestido de rosita.
  3. El correcalles ha disminuido; el ritmo de juego es más lento que en PES 2008 y se asemeja al de PES 6 Next-Gen. Menos mal.
  4. Ya no regateamos con el stick derecho. Ahora se utiliza para lo que sería el pase manual en FIFA. Lástima que calibrar la potencia y dirección con el stick sea tan complicado.
  5. Por lo tanto, ahora regateamos con el gatillo pulsado y el stick izquierdo. Tampoco importa demasiado: basta girar noventa grados para partir la cintura a los débiles defensas del juego. El síndrome Heitinga se ha apoderado de ellos.
  6. El modo Be a Pro Ser Leyenda no está mal. La idea de ganarse el puesto en un equipo con partidillos de entrenamiento está chula. La cámara, no tanto. Hay veces que perdemos de vista el balón.
  7. Hay que reconocer que el editor es bestial. Versátil hasta el punto de permitir introducir cánticos personalizados. No compensa la pérdida de licencias, pero es muy bueno.
  8. El online…Mejor lo dejamos para otro año. Aparentemente no hay demasiado lag, pero defender es imposible, puesto que nuestro jugador nunca llega a cortar el balón debido a la latencia.
  9. La impresión #4 ya ocurría en PES 2. Y el ritmo de juego comentado en #3 lo vimos en PES 6. La conclusión es obvia: cambiar evolución por involución. Y el caso es que funciona.
  10.  Y vaya sí funciona. A pesar de todos los lastres con los que carga una saga desgastada y con alarmantes signos de cansancio, seguirá enganchando a todo aquel que haya disfrutado con PES alguna vez; y lo enganchará de forma directamente proporcional a la cantidad de veces que lamente el estancamiento de una saga que contempla desde la distancia sus años de vino y rosas.

Review Mercenaries 2: World in Flames – Xbox 360

En el Review de hoy le paso el micro a mi compañero y sin embargo colega FranL2P, el cual se ha infiltrado peligrosamente en Venezuela para hacer el mercenario, el cabra y todo lo necesario en pos de profundizar en el flamante título de Pandemic, Mercenaries 2. Sin más, os dejo con sus impresiones, aunque no os creáis nada así que seguidlas a rajatabla.

Mercenaries 2

Bienvenidos a Venezuela

La nueva propuesta de Pandemic Studios nos sitúa en una amplia zona de Venezuela, la cual es completamente explorable, y lo que es más importante destruible. Y es que está será la principal atracción de Mercenaries 2, la posibilidad de destruir todo lo que nos encontremos en nuestro camino, usando toda clase de armas y vehículos.

En la campaña encarnaremos a uno de los tres mercenarios que están a nuestra disposición, repitiendo convocatoria desde el primer Mercenaries; el objetivo será que hagamos honor a nuestra profesión, así que nos dispondremos a conseguir todo el dinero y equipo que podamos. Para conseguir el dinero y el equipo habrá que explorar un extenso aunque desequilibrado mapeado, ya que nos toparemos con unas zonas cargadas de detalles y con otras más bien simplonas.

Por ejemplo, la mansión/base de operaciones, las ciudades y algunas bases militares tienen bastantes detalles, sin embargo las carreteras, campos y demás zonas abiertas son bastantes más simples, con una vegetación bastante básica que “crece” de la nada y con unas zonas de agua bien recreadas pero poco creíbles.

Siguiendo con el apartado gráfico, sí que merecen una mención especial las explosiones, las cuales son realmente espectaculares y destructivas, y es que es una gozada ver como nuestro lanzacohetes hace estragos sobre los edificios, haciendo que estos vuelen por los aires al más puro estilo Hollywoodiense.

Mercenaries 2

Si tiene asiento, condúcelo

Otro de los aspectos destacables de Mercenaries 2 es que todos y cada uno de los vehículos del juego son manejables, desde coches hasta tanques pasando por motocicletas, lanchas, helicópteros, etc. Por desgracia, en los vehículos pasa lo mismo que con los escenarios, que podemos encontrarnos vehículos muy bien modelados y animados, por lo general todos los de origen militar (tanques, blindados, etc.), y otros más cutres y simplones, como los coches civiles o las furgonetas. Algo comprensible de todos modos, dado la gran cantidad de elementos que entran en juego.

Todos estos vehículos pueden comprarse o robarse, siendo esto último lo más divertido -niños, no hagáis esto en la vida real-, sobre todo mientras está siendo manejados por el enemigo. Si intentamos tomar un vehículo tripulado por el enemigo tendremos que pulsar los botones que nos aparezcan en pantalla, como los clásicos QTE -desde luego, Dragon’s Lair ha creado una extensa estirpe- , dando lugar a una secuencia más o menos espectacular, tras la cual habremos tomado el vehículo.

Mercenaries 2

Facciones

Durante la campaña tendremos a nuestra disposición dos tipos de misiones, las propias de nuestra compañía de mercenarios y las que nos ofrezcan las diferentes facciones que nos encontraremos durante el juego. Según nuestro comportamiento con cada una de estas facciones estas serán amistosas u hostiles, por lo que será importante tener claro con quien queremos aliarnos o enemistarnos. La I.A. de estos soldados no es que sea muy brillante, y es que rara vez buscarán cobertura durante los combates y generalmente se limitarán a dispararnos mientras nosotros les acribillamos.

Los civiles tampoco son el paradigma de la inteligencia, por lo que será muy común ver como se abalanzan sobre nuestros vehículos cuando pasamos cerca de ellos, siendo imposible no atropellarles, obligándonos a invertir parte de nuestro dinero en sobornar a los medios para que no salga a la luz el desdichado accidente, como sucede cada vez que muera un civil a nuestras manos.

Como ya se ha comentado, todo lo que nos encontremos puede ser destruido, dándole un toque de realismo a los escenarios. Dicho realismo baja algunos enteros cuando colisionamos a una velocidad ridículamente lenta contra un árbol y logramos derribarlo, o cuando impactamos con nuestro todoterreno contra un turismo y que éste explote bajo nuestras ruedas. Al fin y al cabo, todo gira en torno a elevar la espectacularidad.

El auténtico tesoro que encierra Mercenaries 2 nos lo encontramos en el modo cooperativo; compartir la destrucción con un colega a través de la red multiplica la diversión del título, cuya naturaleza pedía a gritos dicho modo de juego, y aumentando de este modo su duración de forma exponencial. Nadie duda a estas alturas que estamos ante la generación del cooperativo, una fiesta a la que se suma de forma brillante el juego de Pandemic.

Mercenaries 2 Nota 7

Conclusiones

Mercenaries 2 es un juego que derrocha acción desde el primer momento, con un planteamiento simple, masacrar a todos nuestros enemigos, destruyendo todo lo que se cruce en nuestro camino. Los amantes de la acción directa y la libertad de acción se sentirán en su salsa. Y es que pese a los fallos ya mencionados, el juego cumple con su objetivo de entretener, sobre todo en el cooperativo.

FranL2P

Review Sonic Chronicles: La Hermandad Siniestra – Nintendo DS

Bioware, la compañía estadounidense, no son primerizos en esto de crear juegos de rol. Si mencionamos Neverwinter Nights o Mass Effect, todo el mundo asentirá rápidamente, pero su carrera profesional comenzó a forjarse en el camino del éxito con su saga de los Reinos Olvidados, Baldur’s Gate.

SEGA quiere por todos los medios que su personaje franquicia por excelencia vuelva a colocarse en la punta de lanza del mercado, y tras muchos años de oscuridad, La Hermandad Siniestra puede considerarse una notable piedra de toque para volver a la senda correcta. No en vano, dejar la tarea en manos de Bioware ya puede considerarse toda una garantía.

Sonic

Jugabilidad marca de la casa

De este modo, en este RPG para Nintendo DS debemos rescatar a Knuckles, que parece haber sido secuestrado por el sempiterno Dr. Eggman, aquel Robotnik de los viejos tiempos. Aunque el guión no sea nada revolucionario, la historia se va desgranando poco a poco, a través de diálogos, enfrentamientos y hallazgos; como gran virtud, el juego resulta ser bastante dinámico, para mí, una cualidad esencial en un RPG de este calibre para que no apareza la desagradable sensación de monotonía.

A través del Stylus iremos manejando a nuestra party, la cual puede tener hasta cuatro miembros a la vez. Como quiera que existen once personajes seleccionables en total -no faltarán Tails, Amy y alguna sorpresa que otra-, cada uno con sus virtudes y defectos, será cosa nuestra decidir en cada momento cuál nos viene mejor. Explorar el mundo de Sonic, recorriendo parajes harto conocidos por los viejos jugones, como la añorada Green Hill Zone, librar batallas y resolver puzzles será la mecánica habitual en este cartucho.

Bioware ha sabido aprovechar las características de la DS para amenizar las batallas por turnos, de forma que los ataques especiales de cada personaje requieren una hábil respuesta de nuestra parte para que se lleven a cabo con la máxima efectividad, ya sea picando la pantalla en el lugar y momento adecuado, recorriendo una estela definida con el Stylus o simplemente aporreando un punto concreto en décimas de segundo.

Además, la evolución de cada personaje está bastante simplificada y nos llevará el tiempo justo cada vez que suba de nivel alguno de nuestros compañeros; resumiendo su jugabilidad, Sonic Chronicles: La hermandad siniestra logra tener la suficiente profundidad que requiere un RPG, y a su vez, se hace muy llevadero y entretenido al requerir una participación bastante activa por parte del jugador.

La única nota discordante que encuentro en el título es que no se han aprovechado en exceso las posibilidades multijugador, limitándose a la posibilidad de intercambiar las ‘chao’, criaturas algo pokemonizadas que nos reportarán ventajas a lo largo del juego, y que de seguro resultarán familiares para los fans de Sonic.

Sonic

Tecnología de antaño

La perspectiva utilizada en el juego resulta bastante efectiva y satisfactoria: la vista isométrica sobre decorados bidimensionales nos recuerda a épocas pasadas, aquellas en las que Sonic era más de lo que hoy significa. Los artworks utilizados son marca de la casa SEGA, conformando un conjunto gráfico perfectamente reconocible.

Respecto a las melodías, en mi opinión no mantienen el nivel a lo largo del juego, y si bien algunas rayan a gran nivel y encajan perfectamente con la temática, otras se hacen demasiado pesadas o difíciles de escuchar una y otra vez.

Sonic

Conclusión

Bioware acaba de apuntarse otro logro a su exitosa carrera: dotar al universo Sonic de un RPG en condiciones. Con un planteamiento muy dinámico, un apartado técnico tan brillante como nostálgico y con los parámetros que siempre caracterizan a los juegos de la compañía, Sonic Chronicles: La hermandad siniestra se convierte en una recomendación indudable para los que añoren la gloria del puercoespín azul. La siguiente parada será Sonic Unleashed, esta vez en el género plataformas, y espero que mantenga el nivel.

Sonic Chronicles: 8