Jungler: La VFD Flip-top de Gakken

Aunque la empresa de Osaka debutara en los salones recreativos en 1978 con Block Game y Space King, copias de Breakout y Space Invaders respectivamente, Jungler fue uno de los primeros juegos arcade desarrollados por Konami para los salones recreativos y que comenzaban a merecer ser reseñados. Fue creado en 1981 y distribuido en Estados Unidos por Stern a principios de 1982.

El juego presentaba una estructura laberíntica desde una perspectiva cenital; a través de sus intrincados pasadizos aparecía nuestro personaje y sus correspondientes enemigos. La especie de todos estos avatares tenía cierta relación con los reptiles reptantes; en primera instancia nos recordará al Blockade de Gremlin, germen de lo que posteriormente sería conocido como Snake, o familiarmente “el juego de la serpiente”.

Sin embargo, su apariencia visual nos resultaría aún más cercana a la que exhibía el Centipede de Atari; curiosamente, la máquina del ciempiés debutó en los salones recreativos el mismo año que Jungler.

Para diferenciar una criatura reptante de las demás, el juego coloreaba de distinta manera a cada serpiente. Manejábamos la de color blanco, mientras que los enemigos eran verdes, amarillos y rojos, valga este mismo orden para clasificar la peligrosidad y hostilidad de cada una en un rango de menor a mayor intensidad.

La compañía Gakken, vieja conocida por estos lares, habiendo visitado el presente blog con ocasión de enseñaros algunas máquinas de tecnología VFD como Frogger, manufacturó una máquina portátil con idéntica tecnología, la cual pretendía trasladar las sensaciones jugables de la recreativa Jungler. En este caso, Gakken adquirió la licencia a la propia Konami para realizar su particular conversión.

Como sabréis, no siempre era así: tenemos el ejemplo de la máquina Super Puck Monster, la cual diseñaron en Gakken a partir del archiconocido comecocos de Namco, con la que no tuvieron ninguna necesidad de licenciar ni el nombre ni la forma exacta de Pac-Man.

Otro aspecto que diferenciaba a esta portátil de Jungler de otros modelos construidos por Gakken era la forma en la que se replegaba y desplegaba la estructura de la máquina. El modelo “Flip-Top” permitía cerrar con tapa el interior de la portátil, la cual al abrirse desplegaba la parte correspondiente a la lupa que aumentaba la pantalla retroiluminada, la cual sí era idéntica a la de otras VFD. Así, Gakken llegó a lanzar hasta tres máquinas diferentes con este modelo: aparte del mencionado Jungler, estaban Dig-Dug y Amidar, auténticos ilustres del panteón de las máquinas recreativas.

El presente artículo está inspirado a partir del hecho de conseguir una Jungler hace unos pocos días -valgan las fotos que acompañan el artículo como prueba-, la cual se encuentra en buen estado de funcionamiento, aunque por desgracia tiene rota la pestaña que hace encajar la tapa de la máquina, algo que, por otra parte, parecía ser bastante habitual en este modelo de portátil de Gakken.

Por cierto, y como la gran mayoría de VFD de Gakken, funciona tanto con cuatro pilas de 1,5V como con un adaptador de corriente que sea capaz de proporcionarle una fuente de alimentación eléctrica de, lógicamente, 6 voltios. Y así es como la he hecho funcionar en las pruebas, como se ve en las fotos.