La ingente cantidad de oleadas publicitarias, hypes variados, dibujos subiditos de tono a cargo de la comunidad pro-Bayonetta y la demo lanzada en Diciembre tanto en Playstation Network como en Xbox Live culminan finalmente en el producto que mr. Kamiya siempre había soñado, seguramente, desde antes de concebir ese auténtico instaurador de género que fue Devil May Cry. La disyuntiva se presenta, lógicamente, en el momento en el que el jugador final comienza a calibrar si Bayonetta es el beat’em-up moderno definitivo. Se han vertido toneladas de opiniones. El asunto, no hay duda, lo merece.