Uno suele escoger sus favoritos, de forma consciente o deliberada, a la hora de disfrutar de las distintas expresiones de ocio; ya sea en el terreno del videojuego, en la literatura, en el cómic o en el propio cine. Y Christopher Nolan se ha ganado a pulso que servidor espere con tremendas ansias cada nueva obra suya. Dado el estado actual del cine norteamericano, y te gusten más o menos sus concepciones fílmicas, pocos pueden desechar la opinión de que sus películas sobresalen entre la mediocridad absoluta actual.