Uno de los arcades más famosos de todos los tiempos. Con pocas palabras se puede definir a Snow Bros, el videojuego que Toaplan lanzó para recreativas y obtuvo un éxito arrollador, siendo posteriormente portado a una buena cantidad de sistemas domésticos, aunque fuese la placa recreativa la que quedaría asociada con más fuerza a este videojuego.
Toaplan tuvo una inspiración muy definida a la hora de construir esta aventura de plataformas; si Snow Bros se lanzó en el año 1990, cuatro años antes la compañía Taito revolucionó los salones arcade con su Bubble Bobble, basándose en dos personajes carismáticos -los dinosaurios Bub y Bob-, saltos y plataformas, y una forma muy peculiar de acabar con los bichejos que poblaban cada pantalla.
Tales directrices fueron copiadas y pegadas por Toaplan. En Snow Bros, los protagonistas eran dos muñecos de nieve llamados Nick y Tom, que debían superar fases estáticas y llenas de plataformas; y mientras que en Bubble Bobble nuestros héroes debían encerrar en burbujas a los enemigos, en Snow Bros debían acabar con los enemigos convirtiéndolos en bolas de nieve a base de bolazos, para posteriormente empujar tales bolas y limpiar de bichos la pantalla.
Un planteamiento simple y directo, como buen arcade, y cien por cien adictivo. Un diseño de niveles acertado, con una estética muy japonesa y caricaturesca, que atrajo a jugadoras y jugadores de todas las edades. Snow Bros fue portado a los siguientes sistemas domésticos: NES y Game Boy de forma normal; por otro lado, la versión de Genesis se convirtió en toda una rareza que por nuestro país no llegamos a ver (podéis leer sobre él aquí), y el más difícil todavía, una versión para Amiga encargada a la división francesa de la mítica Ocean, que fue finalmente cancelada, y años más tarde desenterrada, mostrando una excelente versión de la recreativa.
Si queréis jugar directamente desde la web a la versión NES, podéis hacerlo desde aquí
¿Más curiosidades? Pues por ejemplo, el argumento: nuestros protagonistas Nick y Tom no nacieron muñecos de nieve, sino príncipes, y además hermanos. Vaya suerte nacer príncipe, diréis. Lo malo es que siempre sale el malvado brujo de turno que rapta a tu mujer y luego te convierte en muñegote de nieve. Y claro, eso puede ser bastante jodido gracias al cambio climático que sufrimos.
También podemos mencionar la segunda parte del juego: Snow Bros 2: With New Elves, donde, como bien decía su título, se unían nuevos protagonistas para ser elegidos, aunque el videojuego tuviera una mecánica idéntica a la del original. Fue lanzado en 1994, donde ya era más complicado hacerse con un nombre en el mundo arcade. Sin embargo, el título «Snow Bros» se mantuvo en el tiempo como uno de los grandes clásicos de las recreativas, sobre todo porque supo llegar a todos los públicos.