El ataque de los clones de Aackosoft

En aquellos tiempos que hoy parecen tan lejanos, quizá no por los bloques de almanaque consumidos, sino por la abismal distancia que presentan los videojuegos que hoy en día salen al mercado con los de mediados de los años 80, existían ciertas compañías desarrolladoras que, sin estar carentes de personal con talento para programar, sí que adolecían de no tener ni una pizca de creatividad en su equipo de diseño. Remember Aackosoft.

Antes de comentar el curioso compendio de juegos de cierta compañía, los cuales nos resultarán más que familiares, sí que quería introducir que la idea de este artículo me vino el viernes pasado, cuando mi compañero Spidey desempolvó una de sus cajas de viejas cintas de cassette -bueno, lo de desempolvar es absolutamente literal, cof, cof- y me regaló un juego que tenía repetido. Su nombre era Moonrider, para MSX.

Y este Moonrider nos invitaba a un curioso viaje, según la leyenda que rezaba en la parte trasera del estuche, decía algo así como: «Debe presentar batalla a través de todo el recorrido en un hostil escenario de una lejana luna inhabitada sedienta de sangre». Ya en este punto, uno podría desconfiar de lo que podía encontrarse en el interior de este videojuego. ¿Cómo diablos puede tener tanta sed de sangre si la luna no está habitada? ¿Os imagináis como yo a la luna con una boca incipiente cargada de colmillos, como si fuera un Pac-Man mutante?

En cualquier caso, Aackosoft era una compañía holandesa -que en muchas ocasiones utilizaba directamente un nombre alternativo, Eaglesoft- especializando dicha denominación para agrupar videojuegos inspirados en otros títulos de relativo éxito, y valga el verbo inspirar como un eufemismo de los más grandes que uno pueda utilizar.

La mayoría de títulos eran programados para MSX, y nosotros, aquí en España, accedíamos a ellos dentro de sellos de colección como el «CLASSICS«, en cualquier caso, siempre bajo el sello budget. Por tanto, teníamos las letras B de Budget y la de Barato; la letra B de Bueno ya era más difícil de conseguir.

Los juegos de Aackosoft/ Eaglesoft eran fácilmente reconocibles, puesto que su loader -la rutina de carga del código del programa- siempre tenía una curiosa peculiaridad; la pantalla principal de carga nos ofrecía un misterioso paisaje con una enorme luna, un camino hacia el horizonte y un degradado de azules, además del título correspondiente custodiado por un águila roja, en clara alusión al nombre de este particular sello. En ese momento la carga se pausaba por momentos, mientras que debajo de la pantalla aparecía una marquesina de texto con información sobre la compañía y otros juegos publicados.

Si bien esta peculiar manera de procesar los datos grabados en la cinta era un mero detalle anecdótico, existía otros patrones que cumplían a rajatabla sus videojuegos. Por un lado, el ya comentado de ser una especie de clon aumentado de juegos de otras compañías, y por otro la capacidad de incorporar speechs digitalizados. Yo diría más: eran las voces digitalizadas que sonaban de forma más nítida en nuestro MSX, al menos así lo recuerdo. Y sin entretenerme más, paso a comentar algunos de los que más sonaron en su época.

Moon Rider (1986)

El primer título, realizado por Dave Aron, es el que previamente he comentado, y en su día me harté de jugar en mi Spectravideo MSX, puesto que resultaba bastante divertido. Era una prueba fehaciente de que, a pesar de que la idea estuviera más que manida, se podía realizar un programa de sencilla mecánica que te mantuviera enganchado un buen puñado de horas.

En este caso manejábamos a un coqueto vehículo lunar de color negro, equipado con dos tipos de disparos, hacia arriba en el eje vertical y hacia delante en el eje horizontal. Lo de «luna inhabitada» resultaba ser un engaño que ni los políticos de hoy día, ya que existían seres hostiles indescriptibles que nos atacaban y que, con sus disparos, abrían cráteres en la luna, con una mala leche que ya quisiera para sí Pepe.

Impagable tanto el «Are you ready to go? Bon Voyage» como el «Game Over» digitalizados, con pasmosa claridad, y el horrible fondo de tonalidad magenta utilizado. Ah, se me olvidaba, por si no lo habíais deducido, el original se llamaba «Moon Patrol» y fue una recreativa manufacturada por Irem en 1982.

Jet Bomber (1985)

En este caso estamos ante un shoot’em-up programado por un tal Steve Course, lanzado directamente con el sello Aackosoft para MSX. Otro juego tremendamente aprovechable, de jugabilidad muy directa y con cierta variedad en sus niveles. Manejábamos un avión que se adentraba en peligrosos terrenos plagados de torretas antiaéreas, cazas multicolor dedicados a eliminarnos, pasajes donde bombardeábamos de arriba a abajo en lugar de disparar hacia delante, y un Final Boss llamado «Base Rebelde«, una especie de tanque que imponía bastante.

Por supuesto, su inspiración fue el mítico Zaxxon de SEGA, manteniéndose tanto la perspectiva isométrica como la posibilidad de controlar el nivel de altitud de nuestra aeronave, algo que aumentaba la dificultad del juego hasta suponer un reto considerable. Lo cutre del juego llegaba en su banda sonora, un ripeo brutal de la fanfarria de Star Wars. Como curiosidad, fue la primera vez que escuché esta melodía, con unos siete años, antes de haber visto ninguna película de la saga. En los créditos del juego aparecía un tal «Lex Luthor» como el autor de la melodía, en una especie de crossover bizarro.

Y cómo no, la voz que entonaba «Je-e-e-e-e-e-t Bomber!!!!» al comienzo del juego. Inolvidable.

Oh Shit! (1984)

Steve Course vuelve por sus fueros, con uno de los títulos más conocidos -dentro de lo que cabe, por supuesto- de Aackosoft. Esto sí que era un auténtico copy-paste, en este caso del Pac-Man. En otros juegos, el programador solía añadir algunos detalles que enriquecían de una u otra forma el juego para darle cierta personalidad, pero aquí teníamos al juego primigenio del comecocos tal cual.

Bueno vale, los fantasmas se llamaban de distinta forma. Según la pantalla inicial del juego, sus nombres atendían a Joey, Paul, Willy y Frankie. Según las instrucciones de juego, estábamos ante el único y genuino clásico arcade. Ya. Come vitaminas, vigila a los fantasmas, cruza el laberinto y… ¡¡¡OH, SHIT!!!

Es por esta expresión por lo que se recuerda a este juego, ya que la voz digitalizada que exclamaba lo que en nuestro idioma sería «Oh, Mierda» era brutal y sonaba cuando nos mataban. Como curiosidad, para Commodore 64 salió una versión mucho más suavizada, denominada «Oh, No». La censura, amigos. La censura.

Robot Wars (1986)

Otro de los clones fusilados de cabo a rabo, en este caso desde el famoso Berzerk, arcade de Atari de 1980, y uno de los primeros juegos en los que se crearon auténticas competiciones de High Score. El juego poseía una gran cantidad de pantallas laberínticas de las que teníamos que escapar, eliminando a los robots que nos topábamos por el camino.

En el original, de vez en cuando aparecía en pantalla el famoso «Evil Otto«, básicamente una carita rechoncha de color amarillo que, botando y botando, nos perseguía de forma inexorable, siendo nuestra única opción escapar. Aquí, por supuesto, también se clonó de forma despiadada. Como curiosidad, estamos ante un juego que optó por inspirarse en uno de los primeros arcade que ofrecía un amplio abanico de voces digitalizadas. Seis años después, lógicamente, el juego ya estaba desfasado.

Boom! (1985)

El todoterreno Steve Course volvía a deleitarnos con una explosión de originalidad y frescura. Al menos a la hora de escoger el título del videojuego, porque el resto era clavadito a Galaxian de Namco. Quizá la portada fuera también digna de destacar, puesto que se mostraba un inmenso océano en una terrorífica noche, con la única iluminación que otorgaba una amenazadora explosión en el horizonte. Perfectamente descriptiva de la onomatopeya del título. Todo vale para enganchar al ingenuo comprador.

Hopper (1983)

Una vez más, Steve Course adapta con moderado acierto una recreativa tan jugada como Frogger; en este caso, la rana se llama Hopper, siendo un primo lejano de la protagonista, pero igualmente tenía sus mismos instintos suicidas. El desarrollo del juego era absolutamente idéntico, tanto a la hora de cruzar la carretera plagada de coches, como la segunda con troncos y hojas en los que apoyarse.

Snake It (1986)

Aquí tenemos a una decente adaptación de la mecánica del famoso juego de la serpiente, que se originó diez años antes del lanzamiento de este juego con el Blockade de Gremlin. Este Snake It contaba con sus voces digitalizadas correspondientes -nos daban la bienvenida a Snake It de forma efusiva-, laberintos con distintas estructuras, setas envenenadas y una serpiente de color azul con una cara muy entrañable.

Space Busters (1985)

Si Galaxian fue copypasteado por Aackosoft, su tío Space Invaders no podía ser menos. En este caso, ni siquiera el título era un dechado de inventiva, rememorando de forma alarmante al original. Al menos, el programador cambiaba, y estaba acreditado como Ben Kokx. El resto del juego era una burda copia de uno de los juegos más copiados de la historia del género.

Conclusiones

Si bien me dejo algún título en el tintero, como el nefasto Mazes Unlimited, un comecocos bizarro donde los haya, Scentipede -parece obvia su procedencia-, Panique (clon del Space Panic, con una portada en la que aparecía una especie de reminiscencia de los extraterrestes reptiles de V enseñando una teta, telita) o Fuzzball (copiando al bueno de Q*Bert), creo que ha quedado claro que en aquellos tiempos, muchos se aprovechaban para lanzar juegos a bajo precio que pudieran tener cierto tirón al parecerse a las recreativas más jugadas de la época.

Y oigan, esta mecánica también se realizaba en nuestro país, pero aquí se hacía con mucho más arte, siempre añadiendo muchísima personalidad a la idea original, y no quedándose en el mero clon. Los ejemplos los dispuse en este post, pero baste citar a Mad Mix Game, Satan, West Bank o Desperado.

Publicado por

Pedja

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5 thoughts on “El ataque de los clones de Aackosoft”

  1. yo tengo ese «classic hooper» pero el que me quedo es con el Snake it!, lo tengo en una cinta de MSX y me encantaba, aunque es tremendamente dificil. Lo he jugado vía emulador de MSX, nostalgia y rememorar algunos juegos buenos.

    Eso si, apuntemos que Snake it! no tiene el movimiento como los juegos de la serpiente, no se mueve automatícamente, es más un juego táctico que de habilidad, ya que los otros es no chocarse con objetos, aquí si te chocas es porque quieres.

    Aún así el juego es complicado, lo he jugado ahora a mis casi 30 y lo es lo es XD.

    El Jet bomber también, es un buen juego, matamarcianos con «alturas» y «3d», era interesante en comparación a otros juegos de la época.

    Estoy rememorando algunos de los mejores juegos o más sonados. Tengo muchos y tal, pero en cuanto a roms me he centrado en los juegos «mejores», (algunos eran malos ya hasta para la época XD), pero hay algunos que merecen la pena ser jugados aunuqe sean 15-20 minutos =).

    El robot wars lo había jugado en una ocasión en un mame, y me gustó mucho como era ese estilo, aún le jugué bastante y gracias a ti sé el nombre ^^.

  2. Genial artículo con mamella incluida y todo para hacerlo casi perfecto salovo porque en el hopper/frogger la segunda tanda es de troncos y tortugas, no troncos y hojas. (en la screenshot se puede apreciar tambien).
    Saludetes

  3. Aterrado me encuentro al ver que en mi casa teníamos la mayoría de los copypastes de Aackosoft XD. Se nota que sería un ahorro a la hora de adquirirlos… «OH SHIIiIiiIiiiiiITTT!»

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