Lo que voy a soltar en plan parrafada introductoria lo podría firmar el mismísimo señor Perogrullo, pero no por hablar en nombre de tan insigne personaje perderé razón en afirmar que la sensación de satisfacción producida por algo o alguien es mucho más potente si te llega de forma inesperada. Y yo esperaba poco, muy poco de este nuevo Gears of War. ¡Sorpresa!